En menos de un minuto, dos hombres con cascos de motocicleta entraron a una barbería de Los Mochis, Sinaloa, y dispararon contra uno de los clientes que murió en el lugar; junto a la víctima, un niño no pudo correr, apenas cubrió su rostro y esperar que la pesadilla terminara.
El crimen quedó grabado por una de las cámaras de seguridad de la barbería; en las imágenes se aprecia a dos clientes esperando su turno, dos barberos, la víctima y el niño. El saldo del ataque fue de una persona asesinada y una más con heridas de bala.
De acuerdo con los primeros reportes, el ataque se produjo alrededor de las 5:00 de la tarde del miércoles 4 de diciembre en una barbería ubicada en las calles Pedro Anaya y Padre Kino. A la llegada de los servicios de emergencia se confirmó que la persona baleado ya no presentaba signos vitales, mientras que uno de los barberos presentaba dos heridas por arma de fuego.
Exlíder de Los Zetas asesinado en Sinaloa
Horas después del crimen, el medio Los Noticieristas recogieron las declaraciones del alcalde de Ahome, Gerardo Vargas Landeros, quien informó que la víctima no era originario de Sinaloa, que lo iban persiguiendo y que le apodaban “El Cholo”.
El asesinato en la barbería de Los Mochis se sumó a otros 13 reportados por el informe diario de homicidios dolosos realizado por autoridades federales y locales, con lo cual los asesinatos en Sinaloa durante los primeros cuatro días de diciembre ya suman 35.
El alcalde de Ahome también agregó que la víctima se dedicaba a actividades ilícitas en el estado de Sonora. De manera extraoficial se indicó que respondía al nombre de Juan Omar Borbolla Figueroa.
A la espera de la confirmación de las autoridades respecto a la identidad de la víctima -cuyo crimen se calificó como un “ajuste de cuentas”-, vale la pena recordar que Borbolla Figueroa fue detenido en enero de 2015 en la Ciudad de México.
Información proporcionada por la Secretaría de Gobernación lo identificó como la persona que dirigía los secuestros, extorsiones , homicidios y narcomenudeo en los municipios de Ciudad Obregón, Hermosillo y Nogales, aunque su centro de operaciones lo mantenía en la capital del país.
Reportes periodísticos ubicaron al Cholo o El 200 como el encargado de reclutar sicarios para la organización criminal de Los Zetas en Sonora para pelear la plaza al Cártel de Sinaloa.
