Este es un modesto tributo al espíritu de Miguel de Cervantes Saavedra y su novela más célebre, Don Quijote de la Mancha. Esta obra maestra inspiró la exitosa obra musical de Broadway, El hombre de la Mancha, que incluye la motivante y bella canción El sueño imposible. He traducido la letra original con rimas y es todo un desafío tratar de conservar en español el espíritu de esta canción inolvidable, que es un símbolo de la causa de todas las personas que han luchado y siguen luchando por el bien de la humanidad y de nuestro planeta. Para los amigos lectores, incluyo en el pódcast la lectura de mi traducción.
Teniendo en cuenta estos antecedentes, me permito enviar un mensaje de felicitación al presidente Joe Biden y a la vicepresidenta Kamala Harris por su fantástico logro diplomático al conseguir la liberación de tres estadounidenses que languidecían en prisiones rusas bajo acusaciones falsas de espionaje: los periodistas Evan Gershkovich y Alsu Kurmasheva, que fueron encarcelados por ese motivo, y el exmarine Paul Whelan, que llevaba cinco años encarcelado igualmente por cargos de espionaje. También fue liberado Vladimir Kara-Murza, activista político y periodista ruso-británico, que había sido condenado a 25 años de prisión por traición tras condenar públicamente la agresión rusa en Ucrania. Un total de 16 personas se beneficiaron de la negociación, entre ellas cinco ciudadanos alemanes y siete rusos, en el mayor canje de prisioneros entre Rusia y Occidente desde la Guerra Fría.
En cuanto a los presos rusos en cárceles occidentales, ocho fueron canjeados de vuelta a Rusia a cambio de la liberación de las 16 personas retenidas en Rusia. Para que Vladímir Putin aceptara el acuerdo, fue decisivo el intercambio del asesino ruso convicto Vadim Krasikov. Vadim, un agente del KGB había sido condenado a prisión perpetua en Alemania por el asesinato, en pleno centro de Berlín, del rebelde checheno de origen georgiano, Tornike Khangoshvili.
Biden mantuvo varias conversaciones sobre el acuerdo con su homólogo alemán, Olaf Scholz, incluso cuando el canciller visitó el Despacho Oval en la Casa Blanca el pasado mes de febrero.
Muchos de los liberados habían colaborado con Alexey Navalny, la principal figura de la oposición rusa y recientemente fallecido. Su viuda, Yulia Navalnaya, escribió en la plataforma X «Cada preso político puesto en libertad es una gran victoria y una alegría. Nadie debe ser rehén de Putin, ser torturado y morir en las cárceles de Putin, como mi esposo».
No olvidemos que incluso en los tiempos más oscuros, el sueño imposible puede hacerse realidad mediante el esfuerzo colectivo, el amor a la libertad y a la justicia.
